Edgardo Antonio Vigo nació en La Plata en 1928. Empleado del Poder Judicial, estudió en la Escuela Superior de Bellas Artes de dicha ciudad, de la que egresó en 1953. Las obras que produciría en los años siguientes permiten pensar acerca de las relaciones entre las artes plásticas y el desarrollo de la técnica en Argentina.
La participación activa de los espectadores en la recepción de sus obras fue una de las constantes a lo largo de su carrera, presente ya en su primera muestra, compuesta de artefactos de madera que podían ser manipulados por el público. En 1970 teorizaría sobre la necesidad de buscar la interacción entre el público y la obra, en su ensayo-manifiesto De la poesía/ proceso a la poesía para y/o a realizar.
Hacia finales de los años 50 la obra de Vigo se transforma y diversifica, abarcando desde la cración de objetos como las "máquinas inútiles", que parodiaban las nociones de funcionalidad y eficacia asociadas a los artefactos técnicos, hasta los "poemas matemáticos" en los que una similar ironía lúdica se insinuaba a través de imágenes compuestas por números y símbolos. A partir de 1961 edita la revista Diagonal Cero, que a lo largo de la década pasaría de publicar poemas en verso libre y xilografías, a poesias visuales y otras obras en las que puede pensarse un afán por experimentar con un lenguaje ligado al desarrollo de la cultura de la imagen y los medios de comunicación. Por esos años, comienza a realizar intercambios de obras a través de una red de arte correo con artistas de Latinoamérica y el resto del mundo, una práctica a la que Vigo prefiere referirse como "comunicación a distancia". Un aspecto, el del intercambio postal de obras, que sería central en la revista Hexágono ´71, publicada entre 1971 y 1975 y consistente en sobres de gran tamaño que contenían láminas y hojas sueltas, con ensayos, poesías visuales y obras gráficas de distinto tipo.
También en esos años, entra en contacto con el grupo de artistas del Centro de Arte y Comunicación, volcados a la experimentación con lenguajes visuales que permitieran la transmisión de mensajes políticos y reflexiones sobre la realidad argentina. El arte al servicio de la comunicación, y la exploración de nuevos ámbitos de exhibición como la calle y otros espacios públicos, fueron ejes centrales que se mantendrían a lo largo de toda su carrera.
En 1975 organiza junto a Horacio Zabala la Última exposición de Arte Correo en la galería Arte Nuevo, de la que participan 200 artistas de 25 países.
Edgardo Antonio Vigo siguió produciendo y exhibiendo sus obras en las décadas siguientes. Falleció en 1997. Sus obras y papeles se conservan en el Centro de Arte Experimental Vigo de la ciudad de La Plata.
"Un tal Vigo", revista ramona
"Edgardo Antonio Vigo", sitio mantenido por Fernando García Delgado